El Madrid de Campúa (IX): La Semana Santa

Artículo publicado el 16 de abril en el diario Informaciones que Pepe Campúa guardaba junto con uno de sus reportajes de Semana Santa

Artículo publicado el 16 de abril en el diario Informaciones que Pepe Campúa guardaba junto con uno de sus reportajes de Semana Santa

Testigo de la vida y las costumbres de la España de postguerra, José Demaría Vázquez «Campúa» fotografió en numerosos momentos las procesiones y celebraciones de la Semana Santa, durante finales de los años 40 y la década de los 50, tanto en Madrid como en otras capitales.

Recogemos a continuación algunos de sus reportajes en procesiones emblemáticas como la de Jesús de Medinaceli, el Santo Entierro, el Cristo del Gran Poder o la procesión del Silencio. Los penitentes y nazarenos, las mujeres vestidas con sus mantillas, los niños y niñas participando en las celebraciones, muestran la devoción popular que tenían en aquellos tiempos las procesiones y las tradiciones de Semana Santa.

Semana Santa en Madrid, fotografiada por Campúa en abril de 1953

Nazarenos en la Puerta del Sol durante la Semana Santa en Madrid, fotografiados por Campúa en abril de 1953

Jesús de Medinaceli

Una de las procesiones con mayor tradición en Madrid es la del Cristo de Medinaceli, que recorre las calles más céntricas y está organizada por la Archicofradía Primaria nacional de la Real e Ilustre Esclavitud de Nuestro Padre Jesús Nazareno. Esta imagen del Cristo fue tallada en la primera mitad del siglo XVII en Sevilla y mide 1,73 metros de altura. Campúa fotografió su paso por la Puerta del Sol y las calles aledañas en numerosas ocasiones, como estas que recogemos de 1949 y 1950.

Procesión del silencio

La Cofradía del Silencio surgió en 1940 con el objetivo de recuperar las procesiones de Semana Santa en Madrid tras la guerra civil. En sus primeros años puso en marcha diversas actividades como un pregón, la Procesión de las Palmas del domingo de ramos, la Procesión del Rosario de Penitencia el miércoles santo y la Solemne Procesión del Silencio en la noche del viernes santo. Esta procesión del Silencio comenzaba habitualmente a las once de la noche y a la Hermandad de los Cruzados se le unían, en la Puerta del Sol, la mayoría de las cofradías y hermandades de la capital. Las imágenes de la galería siguiente corresponden a dicha procesión, que Campúa fotografió en el año 1950 y al Rosario de Penitencia celebrado el miércoles santo de 1958.

Otras procesiones y pasos

La cámara de Campúa también retrató otras de las procesiones más clásicas de la capital, como el Jesús del Gran Poder o el Santo Entierro. Pero, sobre todo, captó la tradición en torno a ellas, los nazarenos, las mujeres enmantilladas y el público que acudía a ver los pasos. En la galería siguiente recogemos algunas de estas fotografías, realizadas por Campúa en la Semana Santa de 1954.

Campanas de resurrección

Además de las procesiones, Campúa también realizó trabajos para ilustrar reportajes sobre otros momentos de la Semana Santa, como el sábado de Gloria. Para el diario Informaciones retrató así las campanas de la iglesia madrileña de San Manuel y San Benito, con el objetivo de ilustrar un artículo de Angulo.

Artículo publicado en Informaciones el 10 de abril de 1952 con foto de Campúa

Artículo publicado en Informaciones el 10 de abril de 1952 con foto de Campúa

El Madrid de Campúa (VIII): Domingo de ramos

La celebración del Domingo de Ramos, que marca el inicio de la Semana Santa, cuenta con una gran tradición en toda España y también en Madrid. Llevar las palmas y palmones a misa, comprar las «aleluyas» o cumplir aquello de «quien no estrena en domingo de ramos no tiene ni pies ni manos», eran costumbres integradas en la sociedad de la época.

Durante los años 50, José Demaría Vázquez «Campúa», atento a la vida y a los acontecimientos de la ciudad, captó con su cámara algunos momentos de esta fiesta tanto por las calles como en la puerta de algunas de las principales iglesias del centro de la capital. A continuación compartimos algunas de ellas.

Además de las escenas callejeras, Pepe Campúa durante los años de la dictadura también realizó numerosos reportajes de la celebración oficial del domingo de ramos en El Pardo. Éstas ocuparon la portada del diario La Vanguardia en varias ocasiones, junto a las fotografías de Pérez de Rozas, que ilustraban las celebraciones desde Barcelona donde el domingo de ramos cuenta también con una gran tradición y que en aquella época congregaba a miles de personas junto a la Sagrada Familia.

Portada de La Vanguardia el 27 de marzo 1956 que informa de la celebración del domingo de ramos en el Palacio del Pardo con foto de Campúa

Portada de La Vanguardia el 27 de marzo 1956 que informa de la celebración del domingo de ramos en el Palacio del Pardo con foto de Campúa

Portada de La Vanguardia el 13 de abril 1954 que informa de la celebración del domingo de ramos en el Palacio del Pardo con foto de Campúa

Portada de La Vanguardia el 13 de abril 1954 que informa de la celebración del domingo de ramos en el Palacio del Pardo con foto de Campúa

Campúa y sus compañeros fotógrafos ante la cámara del Estudio Alfonso

Compartimos, dentro de la sección «Campúa visto por otros», esta fotografía procedente del Archivo Fotográfico Alfonso, una imagen que precursora de las actuales masas de fotógrafos que se ven a menudo a la salida de las instituciones, eventos y edificios oficiales. Una foto sin fecha, que en su ficha original del archivo sólo aparece con la leyenda «Crisis: en la puerta de palacio» y el nº de negativo 117.301.

Crisis en la puerta de palacio. Foto © Alfonso Sánchez Portela (Archivo Fotográfico Alfonso), VEGAP, Madrid, 2014.

Crisis en la puerta de palacio.
Foto © Alfonso Sánchez Portela (Archivo Fotográfico Alfonso), VEGAP, Madrid, 2014.

Un jovencísimo José Demaría Vázquez «Campúa» en el centro de la foto (la sexta cámara por la izquierda) nos permite intuir la fecha y situar la foto en los inicios de su carrera, probablemente entre 1919 y 1923, como muy tarde. Tal vez la imagen corresponde a la crisis de gobierno que se produjo el 25 de febrero de 1920 cuando todo el gabinete dimitió en pleno. Otra posibilidad sería en marzo de 1921 tras el asesinato de Eduardo Dato o quizá con el golpe de estado de Miguel Primo de Rivera el 13 de septiembre de 1923.

Lo que sí documenta el archivo de el Estudio Alfonso son los fotógrafos que aparecen en la imagen, algunos de los principales reporteros de la época. De izquierda a derecha las cámaras pertenecen a: Domingo, Salazar, Contreras, Cortés, Del Río, Campúa (hijo), Orriós, Ortiz, Alfonsito y Pío.

Posa en la instantánea, por tanto, Alfonso Sánchez Portela «Alfonsito», hijo del fotógrafo Alfonso Sánchez García quien pudo entonces haber tomado la fotografía, de no haberlo hecho alguno de los colaboradores de su estudio.

Alfonso padre había cubierto, junto con José Demaría López, «Campúa» padre, la información gráfica de la guerra de África a principios del siglo XX y ambos fueron pioneros del reportaje fotográfico en España. Tal y como les describía Francisco Serrano Anguita en el artículo «Reporterismo gráfico» publicado en el diario Madrid el 4 de noviembre de 1953 (citado por la tesis «La documentación fotográfica en España. Revista La Esfera (1914-1920)» de Juan Miguel Sánchez Vigil):

«Y así llegamos a los dos maestros de la época: Alfonso y Campúa. Tenaces adversarios y fraternales amigos, se encontraban en todas partes y era muy difícil que se ganasen la pelea (…) Uno y otro aparecían donde quiera que hubiese un hecho transcendental, un episodio emocionante o un lance pintoresco. Recorrieron España en múltiples viajes y cuando fue menester batallaron en África, porque lo mismo empuñaron el fusil que hacían clisés para El Heraldo o Nuevo Mundo».

Logotipo del estudio Alfonso

Logotipo del estudio Alfonso

Esa manera de ser grandes amigos y grandes adversarios que tuvieron Alfonso padre y Campúa padre se trasladó de igual forma a sus hijos, Alfonsito y Pepe, quienes también cubrieron la guerra de Marruecos en los años 20 y fueron rivales durante muchos años para conseguir la mejor instantánea de la actualidad política o social. Algunas fuentes afirman que, incluso, Alfonso Sánchez Portela pudo ir a Las Hurdes a intentar fotografiar al rey Alfonso XIII durante su visita oficial, en la que José Demaría Vázquez «Campúa» había sido elegido por sorteo como el único reportero que cubriría el viaje en representando al resto de sus compañeros.

Años más tarde, cuando Pepe Campúa amplió su actividad profesional y se convirtió en empresario cinematográfico, Alfonso también le retrataría en 1935 en el cine Madrid-París, en esta imagen que recogimos anteriormente en esta misma sección del blog. Esa sería otra de tantas veces que posaría para él.

Ambos cubrieron también la Guerra Civil española y, al final de la misma, corrieron distinta suerte. Tal y como explica Francisco Carpio en la biografía de Alfonso Sánchez Portela, publicada en el libro «Héroes sin armas»:

La paz no le traerá precisamente buenos presagios. Junto a los demás miembros de la familia será depurado, se le retira el carnet de prensa y se le permite únicamente trabajar como retratista. Es entonces cuando se dedica intensamente a esa actividad en el estudio familiar, logrando una gran reputación.