Una de las aficiones más conocidas de Francisco Franco era la cinegética. Las cacerías y monterías que organizaba en El Pardo eran destacadas en la prensa de la época y criticadas en privado, por el tiempo que el Jefe de Estado dedicaba a dicha afición en lugar de a las tareas de gobierno. No obstante, las propias cacerías eran uno de los espacios donde, en aquella época, se tomaban decisiones políticas y económicas ya que a ellas eran invitados a menudo personajes influyentes -desde ministros a empresarios, pasando por la hija y los nietos de Franco o el propio Juan Carlos de Borbón, entonces príncipe de Asturias.
En muchas de estas cacerías en El Pardo, José Demaría Vázquez «Campúa» fue testigo gráfico y sus fotos de aquellos eventos sociales ilustraron las páginas de diarios como La Vanguardia o Informaciones. Rescatamos a continuación imágenes de algunas de dichas excursiones cinegéticas que se sucedieron especialmente en las décadas de los 60 y 70.

A la izquierda de estas fotografías panorámicas aparece José Demaría Vázquez «Campúa» con su cámara fotografiando la cacería en El Pardo. En las imágenes no consta fecha pero fueron tomadas posiblemente a finales de los años 60.
Durante los días 12 y 13 de febrero de 1961 José Campúa acudió a una de dichas cacerías en la que, además, obtuvo como fotógrafo la exclusiva de cómo un fusil se le estalló a Franco durante la jornada de caza. Sólo unos meses mas tarde, en diciembre de 1961, el general tendría otro accidente similar que le causaría heridas en la mano izquierda.
Otra de las cacerías a las que asistió el reportero tuvo lugar en febrero de 1964, una montería a la que asistieron los ministros de Gobierno, entre los que se encontraba entonces Manuel Fraga Iribarne, los marqueses de Villaverde, los nietos de Franco y Carmen Polo, entre otras personalidades. La expedición sería publicada en portada por el diario La Vanguardia el 26 de febrero de dicho año.

Portada de La Vanguardia del 26 de febrero de 1964 con fotos de Campúa de la cacería celebrada días antes en El Pardo

José Demaría Vázquez «Campúa» a la izquierda junto a otro fotógrafo de prensa durante una cacería en El Pardo en 1964. Los fotógrafos de prensa también tenían tiempo de ironizar sobre la actividad cinegética durante estos eventos
Una década más tarde, casi al final de su vida, Pepe Campúa seguiría cubriendo como fotógrafo las cacerías en El Pardo, como en la que se celebró en febrero de 1972, entre otras muchas ocasiones.
Campúa sería testigo de estas cacerías al igual que lo fue de muchos momentos tanto de la vida privada como de la vida pública de Francisco Franco durante las más de tres décadas que duró el régimen. Aunque nunca existió un contrato formal entre el reportero y Franco para que éste fuera su fotógrafo de cámara, en ocasiones se ha llegado a hablar de José Demaría Vázquez «Campúa» como el fotógrafo oficial del dictador y en algunas acreditaciones para eventos figura como «Fotógrafo de la Casa Civil de su Excelencia el Jefe de Estado».